Siempre he estado rodeada de hilos, agujas, telas, retales, lanas.....En mi casa las aficiones de mi abuela y de mi madre era estar pegadas a la máquina de coser y pasarse horas haciéndonos vestiditos a mi y a mi hermana.
Así que "de tal palo, tal astilla". Yo he heredado esa afición y he empezado hace algunos años ya, a hacer mis pinitos con fieltro, cosiendo broches y pequeñas muñequitas.
Por eso hoy os quiero hablar del fieltro: material muy maleable que sirve para un montón de cosas: decoración, bisutería, juguetes, ropa, complementos, disfraces, etc...Se puede encontrar en tiendas de telas o de manualidades a un precio irrisorio y hay un montón de colores para elegir. Hay que diferenciar el fieltro de manualidades del fieltro como tela, porque este último es más grueso, de mejor calidad y su precio más elevado. El primero os servirá perfectamente si lo que intentáis es pasar el rato, si preferís un acabado más consistente y profesional, os recomiendo el segundo.
Como ejemplo he hecho una pequeña recopilación de imágenes en Pinterest para que os hagáis una idea del "mundo fieltro"
¿No son adorables? ¿Veis qué cantidad de posibilidades nos ofrece?
Ahora os enseño los trabajitos que he ido haciendo a lo largo de los últimos años....
Son piezas hechas sin patrones que es como mejor se aprende: primero porque los patrones nos ponen las cosas demasiado fáciles (y a mi me gusta complicarme la vida, así sin paños calientes) y segundo porque te ayuda a pensar antes de coser (y esto, aunque parezca una chorrada, es muy importante).
Es verdad que os enseño las mejores piezas; otras no han quedado como quería o no terminaron siendo la idea inicial. Pero cosiendo y deshaciendo, va la niña aprendiendo.
Desde aquí os animo que probéis porque se pueden hacer cosas fantásticas.
Desde aquí os animo que probéis porque se pueden hacer cosas fantásticas.
¿Que os ha parecido?
¿Alguna vez habéis trabajado el fieltro?
¿Qué se os ocurre?
¡Hasta el próximo post y feliz jueves!
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